Mientras miles de bumangueses estaban pendientes del partido de la Superliga, un lamentable caso de sicariato rompió la tranquilidad de un barrio al norte de Bucaramanga. Un joven que transitaba en su moto por el sector fue interceptado y asesinado en la noche del pasado jueves, 6 de febrero.
Por ahora, la Policía investiga las causas de su muerte y ponen como principal hipótesis un ajuste de cuentas por parte de enemigos del hombre. Sin embargo, en medio de los hallazgos se encuentra un chaleco antibalas que pudo haber cambiado la suerte del fallecido.
El hombre fue asesinado por dos sicarios
En la noche del pasado jueves, sobre las 9:40 p.m., Kevin Andrés Hernández se movilizaba en su motocicleta por el barrio Villa Rosa al norte de Bucaramanga junto a su novia, quien lo acompañaba como parrillera.
En cuestión de segundos, otros dos hombres, que se movilizaban también en motocicleta, emprendieron una persecución y, momentos después, frente a un conjunto residencial del sector, el parrillero desenfundó un arma y le propinó tres disparos en la cabeza a Hernández.
El joven, de 23 años, perdió el control de la motocicleta y cayó inmediatamente sobre la vía. A pesar de los esfuerzos de su novia por mantenerlo consciente, su vida se esfumó al instante y no hubo nada que se pudiera hacer para salvarlo.
Los tres impactos de bala cumplieron su cometido y el hombre falleció. Cuerpos de seguridad se trasladaron al lugar para evaluar la situación y realizar el levantamiento del cuerpo del joven.
Ahora, las autoridades avanzan en las investigaciones para dar con los responsables del atroz hecho presentado el pasado jueves.
Pistola – asesinato – feminicidio Foto:iStock
En estas labores, agentes de la Sijin revisaron cámaras de seguridad del sector para verificar los hechos. Al ver las grabaciones, se percataron de que la pareja sentimental del fallecido, segundos después del hecho, posicionó una caja detrás de un vehículo que estaba parqueado en el sector.
Al investigar la caja, los agentes encontraron que había adentro un chaleco que le habría podido servir de protección al fallecido en caso de ser víctima de un ataque. Reportes indican que este tendría una composición muy similar a la de un chaleco antibalas pero no se puede asegurar que sea de ese tipo.
Incluso, aseguran que podría tratarse de un chaleco usado para hacer ejercicio. Sin embargo, las autoridades lo tomaron como evidencia y será objeto de investigación además del porqué la novia de Hernández había intentado ocultarlo. Aún no se conoce si, al momento de su asesinato, Kevin llevaba puesta la prenda.
Este caso de sicariato configura el cuarto asesinato presentado en el área metropolitana de Bucaramanga en tres días.
REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS.