La estenosis benigna o maligna de las vías aéreas es una causa importante de morbilidad y mortalidad. El tratamiento tradicional incluye resección quirúrgica, radioterapia, y quimioterapia. Se han desarrollado nuevos métodos terapéuticos no quirúrgicos como la dilatación neumática con balón, láser, braquiterapia y crioterapia, con la utilización del broncoscopio. La colocación de stents en el árbol traqueo-bronquial solos o como método adicional a los tratamientos convencionales, es una tecnología cuya aplicación se está desarrollando, con muy buenos resultados comparativamente con los obtenidos con los tratamientos tradicionales antes mencionados. (Lea también:
Mauricio Lozano Barriga*
Jefe del Servicio de Radiología General e Intervencionista
Radiólogo Intervencionista CLINICA DE MARLY
Historia
La palabra stent viene del odontólogo inglés Charles Stent, quien a principio del siglo pasado ideó unas prótesis que permitían mantener la función dental. Un stent no remplaza un órgano por lo que no es sinónimo de prótesis, sino que es un aditamento que se coloca en un órgano determinado para que continúe con su función original.
Inicialmente los primeros stents metálicos se utilizaron en arterias coronarias en casos de estenosis, con el fin de que, por su material metálico, mantuvieran permeable la luz del vaso.
Posteriormente estos stents se empezaron a colocar en vasos arteriales y venosos periféricos y luego extendió su uso a la vía biliar, tubo gastrointestinal, árbol traqueo bronquial, uréteres, canales nasolacrimales e inclusive canales de las glandulas salivales. El primer stent metálico aceptado fue el stent tipo Palmaz de acero inoxidable, que se monta en un balón de angioplastia el cual debe inflarse para expandir el stent.
Aparición de los stens Strecker, Gianturco, Wallstent, Smart y Jobstent
Luego aparecieron otros stents como el Strecker, y los autoexpandibles como el Gianturco, el Wallstent de cobalto o el Smart y el Jobstent de Nitinol que es una aleación de titanio y niquel; estos últimos permiten que una vez se posicione el stent en el sitio deseado, él solo de reexpanda hasta lograr su dilatación máxima para la cual fue diseñado y con la temperatura del cuerpo adquieren su máxima distensión.
En el árbol traqueo bronquial se inició con la colocación de tubos de silicona hacia 1967 por Graciano y colaboradores, pero antes, Harkins y Montgomery en 1952 y 1965 colocaron otros tubos de aleaciones, algunos con forma en T para ser posicionados a través de orificios de traqueostomías.
En 1980 Dumon colocó un stent a través de un broncoscopio rígido y en 1982 Westaby colocó el primer tubo bifurcado. La desventaja de estos tubos es su calibre, lo que los hacen de difícil colocación y algunos de ellos, posteriormente, se desplazaban fácilmente. Las ventajas de los…