El 9 de agosto de 2024 se convertirá en una fecha memorable para el deporte colombiano, aunque no por los motivos que muchos desearían. A pesar de las dificultades, Colombia logró sumar dos nuevas medallas de plata en los Juegos Olímpicos de París, alcanzando un total de tres preseas. Sin embargo, este logro también pone de manifiesto las limitaciones persistentes en la preparación y apoyo a los atletas.
𝐏𝐋𝐀𝐓𝐀 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐌𝐀𝐑𝐈
Mari Leivis Sánchez se impuso en la categoría de 71 kilogramos de halterofilia en #Paris2024 con una impresionante marca total de 252 kg.
Arranque: 112 kg
Envión: 145 kg
Total: 257 kg pic.twitter.com/4GIeDCNkAL— Comité Olímpico COL (@OlimpicoCol) August 9, 2024
Jeison López y Mari Sánchez, los más recientes medallistas, ejemplifican el esfuerzo y la dedicación de los deportistas colombianos. Pero, más allá de los momentos de gloria, hay una pregunta que no se puede ignorar: ¿por qué siempre estamos celebrando medallas de plata y no más de oro?
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Mari Sánchez, que comenzó su carrera a los 13 años influenciada por su hermana, ha demostrado ser una competidora excepcional. Su recorrido hasta la medalla de plata es una historia de perseverancia, pero también es un reflejo de las barreras que enfrentan muchos atletas en Colombia. La falta de un sistema de apoyo integral, desde las categorías menores hasta la élite, hace que muchos de nuestros deportistas lleguen a los Juegos Olímpicos con una preparación que, aunque notable, no es suficiente para llevarlos al oro.
Grande lo de Mari Sánchez, pero Colombia necesita mejor infraestructura en el deporte
Durante la competencia, Mari Sánchez levantó 257 kilogramos en total, una hazaña impresionante. Sin embargo, aunque logró la plata, no pudo superar a otra deportista con mejores recursos y apoyo. La estadounidense Olivia Reeves, superó a Sánchez, representa a un país donde el deporte se toma más en serio, donde los atletas no solo reciben incentivos tras el éxito, sino que también cuentan con el respaldo necesario para llegar a la cima.
El deporte colombiano necesita un cambio estructural. No podemos conformarnos con celebrar segundas posiciones mientras otros países continúan superándonos. Es fundamental revisar cómo se están formando y apoyando nuestros atletas, para que el futuro del deporte colombiano no se quede atrapado en la mediana gloria de las medallas de plata.
Mari Sánchez ha hecho historia, pero su legado no debe ser solo el de haber ganado una medalla. Debe ser también el de impulsar una transformación en el sistema deportivo colombiano, para que las futuras generaciones tengan las herramientas necesarias para competir de igual a igual con las potencias mundiales….
