Te explicamos en cinco pasos cómo protegerte de las molestas heridas que se producen en la piel por la fricción con el sillín de la bicicleta.
Salir a pedalear con doble tejido combinando al mismo tiempo un culotte de badana con la ropa interior, suele ser la causa principal de la aparición de heridas en la piel debido a la fricción que se produce con el sillín de la bicicleta. Es muy común que muchos ciclistas sufran fuertes irritaciones y heridas en la zona de la ingle, el trasero y la entrepierna debido a la presión continua y al roce permanente de estas partes del cuerpo con el asiento de su máquina.
Por lo general, la mayoría de los deportistas aficionados suelen pensar que la aparición de llagas profundas y peladuras está asociada a una mala configuración de las medidas de la bicicleta y a un sillín inadecuado, lo que los motiva a cambiarlo por uno altamente competitivo para evitar las rozaduras.
Acostumbra a usar ropa especial para viajar más cómodo
Cortesía: Sport
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Sin embargo, las heridas en la piel pueden seguir apareciendo incluso si tenemos un ajuste perfecto de la geometría y un asiento cómodo y acolchado. Hacer rutas largas sin licras especiales, rodar en ambientes con temperaturas muy altas sin hidratar las zonas sensibles, no depilarse, descuidar la higiene de las partes íntimas o combinar de manera inadecuada el culotte de badana con la ropa interior suelen ser los principales motivos que causan la aparición de este tipo de problemas.
Te explicamos cuáles son los cinco consejos básicos que puedes implementar como ciclista para prevenir las heridas que se producen por la rozadura del sillín. Toma nota, ponlos en práctica y alcanza el máximo grado de protección y comodidad en tus rutas.
Revisa el asiento
Cerciórate de que tu bicicleta cuente con la configuración correcta y que las medidas de la altura y el ajuste longitudinal de tu sillín sean las adecuadas. Es muy importante que elijas un asiento acolchado que se adapte a tu cuerpo y que sea capaz de minimizar la presión; preferiblemente con una oquedad o hendidura en la parte central para no perder riego sanguíneo en la zona genital. De igual forma, debes ser consciente de que la posición del ciclista puede estimular la aparición de heridas, por lo cual debes procurar ubicar el trasero sobre la parte más ancha y plana del sillín con el objetivo de soportar mejor el peso y permitir que los huesos coxales, el sacro y el coxis, que son los que componen la pelvis, realicen el apoyo de manera cómoda.
Puedes protegerte con vaselina
Como lo mencionamos al inicio del artículo, no basta solamente con tener un asiento perfecto. Para proteger la piel del cuerpo y tener un rendimiento óptimo en este deporte también es muy importante incluir en el kit de viaje cremas especiales que nos protejan de los agentes…